“…En este año 2012 el mes de diciembre tendrá 5 sábados, 5
domingos y 5 lunes. Le dicen al náufrago
que esto sólo ocurre cada 824 años. Si
hacemos la cuenta, la última vez que ocurrió fue el año 1188, en plena Edad
Media. O sea que vamos a asistir a un hecho que sólo vieron personajes
como el maestro Mateo, Saladino o Urbano
III. Y no lo vivieron ni Ibn-Said, ni el Arcipreste, ni Alfonso el Onceno, ni el conde de Torrepalma, por citar sólo a
alcalaínos ilustres. Toda la historia comprendida desde el Aquinate a nuestros
días ha estado ausente de esta extraña conjunción del almanaque. Fijaos, por
ejemplo, que ningún Papa, desde Eugenio III ha podido hacer un “milagro”
parecido.
Al náufrago le gustan estas
curiosidades, que son como los misterios de las religiones (vírgenes después de
parir, trinidad en uno, vino en sangre, etc.). Así que, una vez llegado
diciembre, les invito a que celebren como una gran efeméride la alternancia del
5 en los sab-dom-lun , que podrían ser
declarados días vacacionales. Ya no lo verán más hasta los que vivan en 2836,
si ha lugar, ya que -. si hiciéramos caso al calendario maya- el próximo 21 de
diciembre terminaría el mundo. Cosa bastante dudosa, desde luego, a pesar de
que su medida del tiempo se considera astronómicamente exacta y lleva en sí la
llave mística del alma. Pero … si existen 17
calendarios mayas, cómo sabremos cuál es el verdadero. Así que no teman ustedes,
el mundo no terminará.
Curiosidades
del tiempo, esa magnitud física que permite el cambio y ordena la vida, midiendo
la duración o separación de las cosas. Pero hay otro tiempo filosófico, aquel
poetizado por Machado en el famoso “todo pasa y todo queda”.
En sus horas (tiempo) desocupadas, el náufrago divaga por estas travesías, entre la astronomía y la quiromancia. Para eso es náufrago, para rescatar la rebeldía como una nueva forma de romanticismo. Como este mes que sólo se nos aparece cada 824 años. Hemos tenido suerte…”
En sus horas (tiempo) desocupadas, el náufrago divaga por estas travesías, entre la astronomía y la quiromancia. Para eso es náufrago, para rescatar la rebeldía como una nueva forma de romanticismo. Como este mes que sólo se nos aparece cada 824 años. Hemos tenido suerte…”
NB. Este breve artículo aparece en el folleto de Cultura de nov-dic 2012
y si hubiera sido conel calendario lunar o el maya, ¿cuántos domingos y lunes hubieran existido en demasía ?
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